El ABC de pesarse
El peso es una cifra y tú buscas precisión matemática. ¡¡¡Correcto!!! Antes de subirte a la báscula, debes aprender a pesarte correctamente. Te damos algunos consejos y sugerencias prácticas para que te peses fácilmente y con precisión cartesiana.
La báscula, en superficie plana
Lo primero que debes saber es que para que la medición sea correcta, la báscula debe apoyarse en una superficie plana. Cuando te subas al plato, distribuye el peso entre las dos piernas y no te muevas durante unos segundos. No tengas prisa por conocer el resultado: al pesarte no inclines el busto hacia delante para mirar el cuadrante porque las cifras pueden variar.
No te peses todos los días
Otra cosa importante que debes tener en cuenta es que no se puede engordar ni adelgazar en un día, sino que se necesita tiempo, para bien o para mal. Pésate una vez a la semana y siempre el mismo día. Solo así reducirás al mínimo las fluctuaciones de peso ficticias debidas a la digestión y a las actividades de toda la semana.
Pésate siempre el mismo día, en ayunas
Una vez que hayas elegido el día de la semana en el que pesarte, es bueno hacerlo por la mañana, siempre el mismo día, a la misma hora y en ayunas. Recuerda que para que la báscula sea exacta, debes pesarte desnudo o llevar solo ropa interior ligera.
¿Te has pasado con la sal? pésate 48 horas después
Si has cenado una pizza, no te peses a la mañana siguiente para conocer los “estragos”. Ten en cuenta que debes dejar pasar al menos 48 horas antes de subirte a la báscula para que tu organismo pueda eliminar el agua retenida por la gran cantidad de sal que tienen las pizzas.
Repasa todos los parámetros relacionados con el peso
Si en casa tienes una báscula con tecnología de análisis de impedancia multifunción, te recomendamos que antes de usarla aprendas a reconocer todos los valores que puedes medir, como por ejemplo, el nivel de hidratación, el peso de los huesos, el consumo metabólico y el índice de masa corporal. Son valores que te ofrecen una visión general de tu composición corporal. Échales un vistazo. Puede que descubras cosas que no sabes.
Vincula la app a la báscula inalámbrica
Si has comprado una báscula conectada, no te olvides de vincular el dispositivo a la app de tu smartphone. De esta forma podrás registrar y archivar, en gráficos y tablas, la evolución de tu peso en el tiempo. Recuerda compilar después todos los datos solicitados como la edad, el peso y la altura. Son datos indispensables para calcular los parámetros asociados a tu peso y para crear tu perfil personal en la app.
Si estás embarazada o llevas marcapasos, pésate sin miedo
Si llevas un dispositivo médico fijado o implantado, como un marcapasos, elige entre una báscula mecánica o digital que no sea con tecnología de análisis de impedancia. Estos pueden influir en el funcionamiento de estos dispositivos. Y lo mismo ocurre con el embarazo.