La salud humana será el gran desafío del Tercer Milenio: una de las fechas clave en la agenda mundial es el 7 de abril, Día Mundial de la Salud, un evento importante para discutir, planificar e informar, ahora en su 70ª edición.

Cómo nació.

El nacimiento del Día Mundial de la Salud tiene sus orígenes en la Organización Mundial de la Salud de una manera casi simbiótica: el 7 de abril de 1948, la OMS entró oficialmente en vigor, una agencia especial de las Naciones Unidas cuyo objetivo es lograr un alto nivel de salud para todas las poblaciones, entendido no solo como ausencia de enfermedad, sino como bienestar físico, mental y social.

En honor a la fundación de la OMS, el 7 de abril fue la fecha elegida para establecer, a partir de 1950, el Día Mundial de la Salud: un momento en el que cada uno de los 194 países pertenecientes a la OMS tendría que detenerse, confrontarse, trabajar y entregarse. Objetivos compartidos para mejorar el estado de salud de su población.

 

Por qué es bueno.

El 7 de abril se convirtió en una especie de escenario en el que gobiernos, ONG, fundaciones, estructuras médicas compartieron el progreso realizado hasta ese momento y se fijaron metas a largo plazo, identificando los principales problemas e iluminando posibles caminos de desarrollo. Aquí está la gran importancia del Día Mundial de la Salud: reunir diversas emergencias sanitarias internacionales y ofrecer una tabla común para superarlas juntas. Como es fácil pensar, los problemas de salud de los países occidentales son (y han sido) muy diferentes de los de África o el sudeste asiático: si en el primero los enemigos a combatir hoy son diabetes, obesidad y problemas cardíacos, en el segundo los primeros auxilios y las epidemias víricas siguen constituyendo muchas de las razones del sufrimiento prematuro y la muerte.

Por lo que cada año se elige un tema diferente para el Día Mundial de la Salud: canalizar los esfuerzos en una dirección, sin olvidar a nadie.

 

¿Y hoy?

Así, después de centrar la atención en la depresión, el envejecimiento, la tensión arterial y las enfermedades crónicas, durante dos años, el Día Mundial de la Salud ha elegido promover el mismo tema, tan importante como difícil de lograr: la presencia generalizada y preparada de cobertura sanitaria primaria, en todo el mundo.

De hecho, todos consideran que la "atención primaria" es el eslabón más importante en la cadena de salud: de hecho, aquí se juega la mayoría de las políticas de prevención, información, diagnóstico y primeros auxilios de cada paciente. Una cobertura generalizada de atención de salud primaria, calificada y económicamente accesible es el primer gran paso para salvar vidas, por supuesto, pero también una gran cantidad de dinero que se podría reinvertir en infraestructuras y capacitación: miles de millones y miles de millones de dólares que se desperdician cada año en atención de baja calidad, insegura y no validada.

El programa del Día Mundial de la Salud proporciona un intercambio denso de conocimientos, métodos y herramientas entre los países miembros, con el fin de elevar el nivel de salud mundial. Haciéndolo más eficiente y menos costoso.

 

Alguna información adicional

• Hoy en día, cerca de la mitad de la población mundial no recibe la atención que necesita.

• Cada año, alrededor de 100 millones de personas son empujadas por debajo del umbral de pobreza debido a los costos insostenibles de la atención del que no pueden prescindir.

• Si en el período de cinco años de 2012-2016, el gasto mundial en salud creció a una tasa del 1.3% por año, según el Global Health Care Outlook 2018 de Deloitte, el crecimiento del período de cinco años de 2017-2021 será de 4.1% por año: más del triple.